«FELICES PASCUAS»
La tradición de ofrecer huevos en Pascua, se remonta a varios siglos atrás, según algunas fuentes tiene su origen, en el siglo IV.
La costumbre de regalar huevos al inicio de la primavera es muy vieja; en numerosas culturas los huevos representan fecundidad, renacimiento y sobre todo, es un símbolo de bondad. En algunas otras culturas el huevo también representa los 4 elementos de la vida. La cáscara es la tierra, la membrana es el aire, la clara el agua y la yema el fuego.
En la historia se han hecho famosos muchos Huevos de Pascua, algunos por la enormidad de su tamaño, otros por su originalidad. En la Francia del siglo XVI hizo furor la costumbre de decorar los huevos de primavera y los más famosos artistas de la época compitieron en hacer los más bellos diseños. Madame Du Barry recibió en una ocasión un huevo obsequiado por Luis XV que estaba completamente recubierto de oro. Con Napoleón se acostumbraba regalar a las elegantes ciudadanas huevos de azúcar, adornados con flores y guarnecidos de golosinas.
En cuanto a la elaboración, y decoración Carl Fabergé es el artista más famoso; transformó para siempre el mundo de la joyería y el arte, creando piezas únicas, que hasta hoy día son capricho de unos pocos.